La predistribución del ingreso son todos los flujos de dinero que generan los mercados, antes de la intervencion del Estado por medio de impuestos y beneficios. Éstos datos se basan en encuestas representativas nacionalmente, corregidas para mejorar la representación de los estratos más adinerados. También son consistentes con las cifras oficiales de crecimiento y de composición del ingreso macroeconomíco.
Latinoamérica clasifica dentro de las regiones más desiguales del mundo, aunque la situación varía según el período y el país.
Comenzamos analizando el indice de Gini, una medida resumida de la desigualdad en la población de un país, que en este caso considera el ingreso promedio de las personas dentro de su hogar. El índice varía entre 0 y 100%, dónde 0 representa la extrema igualdad y 100% representa la extrema desigualdad. En el gráfico puedes seleccionar paises especificos para apreciar con mayor claridad la trayectoria del indicador desde el año 2000. También puedes seleccionar distintas unidades de analisis, como el ingreso de los individuos y las parejas, o la población activa solamente, aparte de los ingresos per capita del hogar.
Dentro de los 10 paises que tienen datos, Chile, Colombia,
Brasil y México se ubican consistentemente entre los más desiguales,
rondando valores cercanos a 70%. Los cuatro paises han mantenido niveles
estables de extrema desigualdad, con ligeros aumentos en ciertos casos.
Por otro lado, países como Argentina, El Salvador, Ecuador y sobre todo
Uruguay se han mantenido en niveles de menor desigualdad y lo han ido
disminuyendo con el pasar del tiempo. Éstos paises presentan indices de
Gini bastante menores –casi 30 puntos más bajos– rondando valores
cercanos a 40% justo antes de la pandemia. En el caso de Costa Rica y
Perú, se observan niveles intermedios con cierta tendencia a la baja
hacia la mitad del período, pero con aumentos notorios en los años más
recientes.
Los menús desplegables del gráfico permiten entrever la
estructura de la distribución dentro de cáda país. Puedes elegir
indicadores como la parte del ingreso concentrada por distitntos grupos
de la población, cómo el 1% o el 10% más rico, la ‘clase media’ que se
aproxima con el 40% del medio, y la mitad de la población con menores
recursos. Se puede apreciar cierta regularidad en los
resultados, dónde los países con mayor concentración del ingreso en el
1% o 10% más rico son los mismos donde la mitad más pobre concentra
menores ingresos. En su conjunto, estos indicadores nos muestran que los
países más grandes, y con mayor peso económico de la región, se han
mantenido en niveles extremos de desigualdad, con ingresos muy
concentrados arriba de la distribución, donde un 10% de la población
concentra sistematicamente más de la mitad del producto anual de los
paises. En el resto de los países, a pesar de tener niveles más bajos de
concentración, siguen siendo altos comparados a otras regiones como
Europa o Asia.
Una forma más directa de visualizar la estructura de la distribución es la curva de Pen, que se presenta en la visualización. Representa la relación entre el nivel de ingreso y el porcentaje de la población que se encuentra por encima o por debajo de él. En general, se observa que en los países más igualitarios, la curva tiende a ser más plana, lo que indica que una mayor proporción de la población tiene acceso a ingresos similares. Por el contrario, en países con altos niveles de desigualdad, la curva de Penn tiende a ser más pronunciada, dibujando una rampa, lo que significa que una pequeña proporción de la población concentra la mayor parte de la riqueza, mientras que la mayoría tiene ingresos más bajos. Puedes seleccionar con el deslizador un porcentaje de la población para obtener el monto promedio en cada nivel, dentro de cada uno de los 10 paises, en moneda local.
La economía comportamental estudia cómo los individuos toman
decisiones económicas, y entre otros aspectos, la forma en que
percibimos nuestra situación financiera en comparación con los demás. La
literatura empirica ha demostrado que cuando se nos pregunta dónde
creemos que nos ubicamos en la distribución de ingresos, la mayoría de
las personas tiende a identificarse como parte de la clase media.
Independientemente de si realmente estamos en un nivel de ingresos más
alto o más bajo, tendemos a vernos a nosotros mismos como miembros de
esta amplia categoría. Esto se debe en gran medida a nuestra tendencia
natural de compararnos con aquellos que nos rodean, en lugar de
considerar la distribución de ingresos en su totalidad. De igual forma,
la mayoría de la gente tiende a subestimar el nivel de concentración
económica de los países. Un factor importante que contribuye a éste
efecto es la falta de información y comprensión sobre la distribución,
basada en estadísticas nacionales, de los ingresos en la sociedad.
Los menús desplegables del gráfico permiten seleccionar el nivel de agrupación del limite alto. Por defecto, el máximo se define como el nivel promedio del 1% más rico, aunque también puedes seleccionar el 0.1% o el 0.01%, que son tan altos que el resto de la distribución se vuelve casi insignificante en comparación.
En la figura siguiente se apilan de la misma manera los deciles, pero esta vez con el porcentaje del ingreso que acumula cada decil en los diez países latinoamericanos.
Habiendo dimensionado la diferencia en los niveles de ingreso de cada grupo, ahora nos enfocamos en el volumen de ingreso acumulado. Aqui presentamos una última forma de visualizar la predistribución del ingreso, agrupando a la población en grupos de igual tamaño. Dividimos a la población en diez grupos iguales, cada uno representando a una décima parte de la población total. Estos grupos –llamados deciles– se organizan de manera ascendente según el ingreso. En una situación extrema donde reciben el mismo porcentaje del ingreso, que representa el tamaño de cada grupo, lucirían así.
En la siguiente sección podrás observar el impacto distributivo
de los impuestos y transferencias, que resultan en lo que llamamos la redistribución.